El mejor detective del mundo se apresura a resolver un último misterio en esta historia de Sherlock Holmes, que es a la vez íntima y elegíaca. McKellen, como era de esperar, ofrece una actuación soberbia.
Un pretencioso biopic británico sobre el prodigioso matemático Alan Turing, que presenta cada tragedia personal y cada triunfo profesional de manera tan precisa que todo ocurre en el momento adecuado y sin ningún desliz.
Clooney ha transformado una historia fascinante basada en hechos reales en una película traviesa, sumamente aburrida y monótona. Se siente como una pieza de museo que retrata a personas de museo.
'Jimmy P.' mejora cuando sus dos protagonistas comparten la pantalla. La caprichosa y melodramática partitura de Howard Shore realza varias escenas, pero también amenaza con opacar muchas otras.
La secuela de John Boorman a su magistral 'Esperanza y gloria' no llega al nivel de su predecesora, pero ofrece una vívida instantánea del ejército y de la vida familiar en la post-guerra de Inglaterra.
No se puede negar que Daniels sabe cómo presionar los botones del espectador, y aunque cruda y evidente 'El mayordomo' también resulta realmente conmovedora. Al final, es difícil no sentirse conmovido, pero también un poco maltratado.
El afilado retrato que DuVernay hace del movimiento por los Derechos Civiles es políticamente astuto y psicológicamente agudo. Reforzado por el guión bien documentado de Paul Webb y una interpretación principal de David Oyelowo elegante y majestuosa.
Un relato irresistible sobre la trastienda del cine. Muestra un gran afecto por Hollywood como "fábrica de sueños" y presenta de manera maliciosa el proceso de realización de una película.
Tal vez lo más sorprendente para algunos espectadores sea que a la película le sobre algo que siempre se ha dicho que les faltaba a los Coen: profundidad y sinceridad de corazón.
Si bien la hipnótica interpretación de Johnny Depp es la atracción principal de 'Black Mass', hay mucho que recomendar en esta sobria, extensa y muy absorbente evocación del feudo de Bulger en el sur de Boston.
Una farsa de fumetas estilosa y suntuosamente divertida que tiene menos en común con 'El gran Lebowski' que con la tensión fatalista de los noirs setenteros de California. Extraña, deshilvanada y totalmente deliciosa.
Al igual que hizo 'La vita è bella' antes, yuxtapone imágenes horribles de tortura y humillación con optimismo pegajoso y piensa que está diciendo algo profundo sobre la resistencia humana en el proceso.
Los espíritus de los maestros del género ochentero como John Carpenter, Walter Hill y William Lusting planean fuertemente sobre 'Cold in July', una pieza sublime de pulp fiction texana.
En términos cinematográficos y narrativos, es un trabajo destinado a estudiarse en las escuelas de cine en el futuro. No tiene ni un solo momento falso. Y luego está Bardem.
Mientras Egoyan y su equipo merecen reconocimiento por manejar con cuidado un material que podría haber encajado en una película de terror intenso, el resultado final se siente como una propuesta densa y poco inspiradora.