Parece mucho más moderna que 'Psycho' y las actuaciones tienen una espontaneidad que todavía no había llegado en 1960. Aun así, la película es algo retrógrada.
Tiene una profundidad de sentimientos sorprendente. Como los clásicos de ciencia ficción, 'Solaris' seduce con sus grandes ideas, pero no separa cuerpo y mente.
La más larga y tediosa de todas, 'At World's End' se arrastra con toneladas de exposición que no sólo no clarifican la historia, sino que dejan de lado las insensateces que hicieron que la primera fuera entretenida.
Con el símbolo del dólar en sus ojos y nada en su corazón, 'Shark Tale' calcula cada momento para agradar lo máximo posible, pero su impacto es muy impersonal.
Intenta funcionar tanto como arte como entretenimiento, preferiblemente al mismo tiempo, lo que la hace o una comedia musical excepcionalmente oscura o una declaración de suicidio inusualmente alegre.
The 33' intenta ser una visión completa de los esfuerzos sobre la tierra y debajo de ella, pero termina pareciéndose más a una exagerada película de desastres de Irwin Allen que a un sobrio docudrama.
La sensibilidad de los Farrelly se diluye en los convencionalismos de esta comedia romántica genérica. Barrymore se muestra en su mejor momento, brillando con un encanto natural.
Es una corrección necesaria a décadas de mala prensa. Es un tributo genuino a su figura como genio musical, y también sirve de introducción accesible para los que saben poco de ella.
Tropieza en la parte final, que parece improvisada. El documental presenta una cualidad promocional que resta fuerza al drama político. Los seguidores de Obama querrán observar los ideales del expresidente en acción.
Las escenas ornamentadas de Sorrentino son deslumbrantes, pero a medida que se acumulan durante dos horas, se vuelven más distractoras que reveladoras.
Polanski logra que su protagonista sea un hombre invisible; sin embargo, las visiones que presenta son notablemente ordinarias y sin encanto, similares a las de muchos otros dramas sobre el Holocausto.
Una película pomposa y convencional. Como muchos biopic de artistas, las conexiones entre la vida y el arte en 'Frida' son a menudo demasiado simples o bien oscuras.
Perkins no logra transmitir el coraje, la fragilidad o la profundidad que la escritura de Frank sugiere, y la pesada honestidad de la dirección de George no beneficia ni a la película ni a su interpretación.