La serie podría haber sido más concisa, pero aún así logra provocar reflexiones sobre lo absurdo del sistema capitalista y la decadencia de sus mecanismos de supervivencia, descarte y humillación.
Con una fotografía que emplea tonalidades azules y frías, junto con el uso impactante de espacios urbanos desiertos, 'Hogar' desarrolla una poderosa propuesta visual. A su lado, se presenta una narrativa profundamente interpretada, realizando un retrato crudo y desilusionado.
Aunque la película no logra equilibrar todos sus elementos, se destaca por las ricas relaciones simbólicas y metafóricas que presenta, así como por la dirección magistral de los actores.
La dirección de John Barr, quien inicia su carrera tras su paso como fotógrafo de cine, destaca por su enfoque visual y minimalista, creando un lienzo en blanco con trazos significativos.
Este filme logra captar la agonía y la rabia de un artista que, con el paso del tiempo, intensifica su entrega a través de su música. Es, en ese sentido, una obra hermosa y poderosa.
No solo se narra el colapso, sino que también se hace una reflexión sobre la sociedad. Es una lástima que el final del filme, que resulta excesivamente indulgente, impida que 'Demolición' ocupe un lugar destacado en la obra del cineasta canadiense.
Una cinta no muy original ni pareja, pero es cierto también que consigue captar la atención del espectador, algo de su complicidad y, (...) francas sonrisas.
Allen se asemeja a un director como Éric Rohmer en esta obra, donde la profundidad se oculta en la ligereza. La fotografía de Vittorio Storaro proporciona una luz intensa y limpia, realzando las superficies de manera similar a una brisa revitalizante.
El montaje de líneas paralelas, reminiscentes de la famosa secuencia de 'Magnolia', destaca como el punto más fuerte de la película. Muestra las posibilidades del cine peruano al equilibrar su lado popular con un enfoque más artístico.
'2 otoños, 3 inviernos' ofrece momentos de frescura y calidez, en parte gracias a la melancólica interpretación de Vincent Macaigne, aunque es probable que no deje una huella duradera en nuestra memoria.
La decepción de la cinta peruana radica, principalmente, en la actuación de Carlos Alcántara como León. Además, la falta de creatividad del director es otro gran inconveniente, ya que en su mayoría replica la versión original de forma casi literal.
Presenta una dulzura melancólica y aguda. Los personajes enfrentan sus debilidades y reflexionan sobre la mortalidad. Es un filme maduro, atemporal, que se atreve a explorar los sentimientos de sus protagonistas de una manera poco común en la actualidad.
Es un debut demasiado explícito y verbal, que confía poco en la imagen y que hace de su denuncia un mensaje obvio, muy poco sugerente o realmente emotivo.