Poster de El circo de los extraños

Críticas El circo de los extraños (2009)

Darren Shan es un estudiante ejemplar que pasa su tiempo con su amigo Steve y generalmente se mantiene alejado de problemas. Sin embargo, su vida da un giro inesperado cuando un misterioso circo ambulante aparece. Un vampiro llamado Larten Crepsley (John C. Reilly) se ofrece como mentor a los chicos, invitándolos a unirse al Circo de los Extraños, donde se exhiben criaturas singulares como el Chico Serpiente, el Hombre Lobo y la mujer barbuda. Pronto, Darren se convierte en un objetivo tanto para los vampiros como para sus peligrosos adversarios, los 'vampenezes'. El joven luchará por evitar que la guerra inminente le arrebate la poca humanidad que le queda.

Andrea Gronvall Chicago Reader

Mezclando terror y comedia mientras que minimiza el gore, el escritor y director Paul Weitz ofrece una ingeniosa fantasía de aventuras con una sabrosa porción de alegría por el mal ajeno.

Kirk Honeycutt The Hollywood Reporter

Una película de vampiros con una dolorosa necesidad de sangre. El público se perderá en esta densa mezcla de no muertos, travesuras adolescentes, comedia fallida y personajes excéntricos.

James Berardinelli ReelViews

Una experiencia profundamente satisfactoria, por no hablar de la naturaleza trillada de la trama y la mediocre actuación del actor principal.

Sergi Sánchez Diario La Razón

Vampiros sin sangre. Weitz no logra aportar coherencia al conjunto, que alterna entre un relato de iniciación y un cine de terror simplificado. La película pierde fuerza, saturada de 'freaks' y efectos digitales.

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