Críticas Loverboy (1989)

Randy Bodek (Patrick Dempsey) es un estudiante que, al inicio de sus vacaciones de verano, enfrenta momentos difíciles tras obtener malas calificaciones y ser dejado por su novia, quien no se atreve a presentarlo a sus padres. Para costear su matrícula, acepta un trabajo como repartidor en "Señor Pizza", vestido con un cómico traje que incluye un sombrero mexicano y un mostacho postizo. Su vida da un giro inesperado al conocer a Alex Barnett (Barbara Carrera), una atractiva mujer madura. Rápidamente, Randy se convierte en "el doctor del amor de Beverly Hills", recibiendo numerosas solicitudes para entregar pizza con "doble ración de anchoas" a solitarias mujeres casadas en busca de atención y afecto. Su ingreso aumenta a 200 dólares la hora y se sumerge en un intenso aprendizaje sobre cómo tratar a las mujeres, mientras oculta su verdadera ocupación a su familia, novia y a los esposos de las clientas. La situación se complica cuando recibe un pedido inesperado de la mujer que menos imagina.