Críticas Asesinos natos (1994)

Un engendro amorfo y artísticamente insignificante: un rentable engañabobos. No estamos ante la energía creadora de una obra artística sobre la violencia, sino ante la fofa blandura de una simulación o un juego de violencia de barra de pub de moda ñoña.

Stone nunca ha sido un director conocido por su discreción o sutileza. Hace todo lo posible para conseguir el efecto y es una de las cosas que valoro de él.

Verdaderamente desagradable. Un vídeo musical delirante y monótono con la duración de un largometraje.

Tiene una relevancia contemporánea que es innegable. También es la película más emocionante de Oliver Stone hasta la fecha en términos cinematográficos.

Consigue ser una experiencia audiovisual arriesgada y atrevida de las que rara vez ven la luz, con Stone construyendo una visión aterradoramente reconocible de EE. UU.

Incoherente como drama o sátira, esta carnicería surrealista derrocha audacia visual. 'Killers' es un estallido sensorial.

Febril, psicodélica y extremadamente sangrienta, esta película es una experiencia única. La parte final es una de las más poderosas y audaces que ha realizado Stone en toda su carrera.

Stone no es un sensacionalista vacío. Es un moralista, un visionario. Quiere iluminarnos. El principal problema de 'Killers' es que degenera en lo mismo que critica.

Es a la vez fenomenal y poco remarcable. Técnicamente es extraordinaria. Los actores no tienen suficiente espacio para desarrollar sus personajes.

Ambiciosa, imparable e inventiva, esta hazaña cinematográfica estimula al intelecto y agita los sentidos.