Poster de Jóvenes ocultos

Críticas Jóvenes ocultos (1987)

Sam (Corey Haim) y Michael Emerson (Jason Patric) son dos chicos estadounidenses comunes. Tras el divorcio de sus padres, se mudan con su madre a la apacible ciudad de Santa Carla (California), donde circulan rumores sobre vampiros. La personalidad de Michael experimenta un notable cambio al unirse a una pandilla de moteros, cuyo líder es el carismático David (Kiefer Sutherland). A su madre no le gustaría nada lo que está sucediendo.

Roger Ebert rogerebert.com

Un entretenimiento ambicioso que comienza con fuerza pero que finalmente pierde su esencia. Al finalizar, no queda nada memorable de la experiencia cinematográfica, solo una técnica que se pone al servicio de una fórmula preestablecida.

Desson Thomson The Washington Post

'Boys' comienza de manera brillante. El resultado es un atractivo híbrido de terror y comedia suburbana. Sin embargo, la película pierde su valentía y originalidad, optando por un desenlace predecible al estilo de Spielberg.

Dave Kehr Chicago Reader

Se desarrolla en fragmentos de tres minutos visualmente impresionantes, pero parece que no se preocupa por el aspecto narrativo. Los balbuceos de Schumacher y su enfoque superficial del material resultan decepcionantes.

Variety Variety

Una obra de vampiros para adolescentes terriblemente espantosa.

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