Críticas Fire Island (2022)

'Fire Island' es una comedia romántica entretenida y encantadora, que resalta el sentido de comunidad.

Sin duda, si la edad de oro del cine gay está entrando por fin en el mainstream, la marca de ingenio y desafío de Booster es muy necesaria.

Una comedia romántica muy divertida, dulce e inclusiva con excelentes interpretaciones. 'Fire Island' es una película cómoda que probablemente dará muchas alegrías al público queer y a otros.

Al final, es posible que acabes deseando lo que tienen estos brillantes y atractivos personajes; también es probable que pienses que una situación así no ocurre en la vida real.

Andrew Ahn ha creado una película reconfortante que honra el romance de la novela de Jane Austen, potenciada por algunas simpáticas interpretaciones.

Aporta un valor añadido a la historia cultural de una isla que, a lo largo de los años, ha representado para muchas personas el único lugar donde podían ser -y a veces encontrar- su verdadero yo.

Incluso cuando encuentra su equilibrio, 'Fire Island' puede ser demasiado obvia. Sin embargo, no se puede dudar del corazón que hay detrás de las decisiones de la comedia romántica tradicional.

La combinación perfecta de ligereza, frivolidad y ternura, el guion de Booster y la dirección artística de Ahn son un paraíso gay

Lleva con eficacia su corazón en la manga sudorosa y pegajosa. Vende la sinceridad con la misma seguridad con la que vende el chiste del sexo oral asesino, el cual merece la pena verse por sí solo.