Críticas Imaginary (2024)

Película que parece extraída de un mal curso introductorio de terror, 'Imaginary' se convierte en otro gran error para Blumhouse.

Blumhouse ha tenido éxitos, pero esta vez se enfrenta a un nuevo tropiezo con una película de terror que resulta ser un desastre, enfocándose en un amigo imaginario.

Esta película de terror, aunque no aporta nada nuevo, es una opción que cumple con las expectativas del género.

La última entrega de Blumhouse resulta ser un completo fracaso, presentando secuencias vacías y personajes estereotipados que no aportan nada nuevo y que han sido repetidos en múltiples ocasiones.

Nunca jamás recomendaría este predecible thriller de terror.

Se salta la directriz de entretener, resultando tan acartonada, pedestre y monótona como puede resultar algo para rellenar el mes de marzo.

La reciente película de Blumhouse no logra generar tanto terror como algunos osos de peluche reales que parecen más amenazantes.

A pesar de los fallos en la trama, Wise y Braun logran dar profundidad a sus personajes, lo que los hace realmente creíbles.

Un conjunto de conceptos que no logran desarrollarse adecuadamente, perjudicados por una actuación poco auténtica, diálogos artificiales y un desenlace decepcionante.

Wadlow no logra desarrollar adecuadamente una narrativa en un plano onírico, evidenciando su enfoque más como director de series que de películas. 'Imaginary' se siente como un intento fallido de revivir el pasado de Blumhouse, repleto de clichés del género de terror.

Sosa película de terror que se desinfla paulatinamente a partir del momento en el que un giro de guión desvela el principal misterio de la trama. La premisa inicial daba para algo mucho mejor.

Es solo otro producto más de nostalgia ochentera, sumamente menor pero realizado con el conocimiento de causa para al menos ser funcional si no se toma muy en serio, presentándose como un vehículo de terror curiosamente simpático y familiar.