Poster de La parte de los ángeles

Críticas La parte de los ángeles (2012)

Robbie es un joven padre primerizo de Glasgow que lucha por dejar atrás su pasado delictivo. Al igual que sus nuevos amigos, Rhino, Albert y la joven Mo, él evita por poco la prisión, pero termina cumpliendo una condena de trabajos sociales. Henri, el educador asignado a su caso, se convierte en su mentor y lo introduce en secreto... en el arte del whisky. Rodeado de destilerías y catas, Robbie descubre su inesperado talento como catador, siendo capaz de reconocer las cosechas más excepcionales y costosas.

Carlos Boyero Diario El País

Loach y Laverty capturan nuevamente la esencia y el ingenio en una película que muestra un profundo aprecio por sus personajes. Mantiene siempre el interés del espectador, entrelazando momentos conmovedores con toques de humor.

Luis Martínez Diario El Mundo

Loach elige la opción más simple, aunque lo hace de una manera poco creíble.

Miguel Frías Diario Clarín

Una película fresca y emotiva, es cierto, aunque también podría decirse: ligera y algo manipuladora.

Horacio Bernades Diario Página 12

Aunque se echan de menos las sutilezas estilísticas de otras obras y en ciertos momentos hay un exceso de guion en lugar de frescura, el director británico consigue establecer una conexión entrañable con sus actores no profesionales.

Javier Mattio Diario La Voz del Interior

A pesar de que la película deja una impresión etérea, Loach evita transmitir mensajes obvios y se permite narrar una historia moralmente ambigua, disfrutando de su libertad creativa.

Diego Lerer MicropsiaCine.com

Es una comedia simpática y ligera que, aunque no se considera una gran obra, ofrece una experiencia entretenida que se desvanece rápidamente de la memoria.

Fernanda Solórzano Letras Libres

Fiel al realismo social y utilizando actores no profesionales, Loach explora el desempleo juvenil sin ofrecer lecciones de superación personal.

Paraná Sendrós Diario Ámbito Financiero

Comedia dramática que destaca por sus actores convincentes, personajes entrañables y una historia bien construida, todo en manos del talentoso Ken Loach.

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