Críticas The Walking Dead (2010)

La temporada arranca con una introducción sin precedentes en la historia de la serie. Un notable acierto que eleva la trama a un nuevo nivel.

Parece que la serie ha regresado a su esencia.

La segunda parte de la décima temporada mantiene la calidad que se espera de este western sin salida. Presenta sorpresas y giros interesantes que enganchan al espectador, aunque se puede sentir un cierto nivel de agotamiento en la trama.

Las cosas se están poniendo muy interesantes. 'Walking Dead' parece haber recuperado su mejor versión.

Al final parece que 'The Walking Dead' está logrando convertirse en una serie que realmente amemos, en lugar de ser una que amamos odiar.

Es desconcertante observar cómo 'Walking Dead' intensifica el sufrimiento, a pesar de que ya hemos presenciado una cantidad considerable de calamidades.

El apocalipsis zombi alcanza su punto más tedioso en esta séptima temporada. En lugar de avanzar con emoción, se siente como una interminable y agotadora prueba de paciencia.

La verborrea, y no la violencia, es lo que desmerece a 'The Walking Dead'. A pesar de ello, la serie continúa siendo emocionante, intensa y, sin duda, sorprendentemente brutal.

'The Walking Dead' destaca la relevancia de los monstruos, equilibrando esta temática con la naturaleza humana y esos inquietantes momentos nocturnos que nos hacen sentir que aquellos a nuestro alrededor podrían devorarnos.

Si se considera como un festival de sustos, 'The Walking Dead' logra un notable éxito, reflejando el miedo y la incertidumbre de despertar en un mundo donde uno pasa de ser humano a ser presa en peligro de extinción para los zombies.

No hay forma de ser un amante de las series y dejar pasar esta producción, el inicio del final. Es, sin duda, una de las series que ha alcanzado mayor éxito en la historia.