Críticas Dilo alto y fuerte (2021)

Toca muchos clichés del drama educativo, pero aún así se las arregla para encontrar nuevas y estimulantes variaciones de la fórmula. Todavía vale la pena asistir a esta escuela de rap.

Ayouch desarrolló la narrativa durante el rodaje. Este método aporta una sensación de frescura y vitalidad, pero a la vez puede difuminar los arcos emocionales y las situaciones dramáticas.

El director franco-marroquí Nabil Ayouch presenta una película juvenil vibrante y entretenida. Esta obra es una clara y prometedora evidencia de que pueden surgir nuevas ideas en una sociedad con fuertes convicciones religiosas.

Echa chispas, pero no llega a prender. Un drama agudo y enérgico políticamente sobre el hip-hop. Con una gramática cinematográfica pura y directa, Ayouch mantiene el encuadre lleno de energía y tensión creativa.

Hay muchas cosas que pueden gustar de esta película, pero es difícil no desear que Ayouch hubiera dado a su trama el mismo ritmo que los estudiantes dan a sus rimas.

La película 'Casablanca Beats' ilustra que la expresión personal tiene el potencial de transformar el mundo. A lo largo de su narrativa, logra capturar este mensaje de manera efectiva.

Un excelente relato que es a la vez una historia de amor con el hip hop y una aproximación a cómo la juventud marroquí está desafiando los puntos de vista ortodoxos en la era digital.

La forma de vestir y de comunicarse, así como su uso de la libertad, aportan un aire novedoso a la trama, que está repleta de conflictos tanto sociales como personales. Los actores entregan su mejor actuación frente a la cámara.

Historia de trama sencilla que narra la vida de un club de poetas. Comienza con debates en el aula al estilo de un documental francés y se transforma en un vibrante musical rapero.