Poster de Los descendientes

Críticas Los descendientes (2011)

Matt King (George Clooney) es un padre de dos hijas que se ve obligado a reconsiderar su vida cuando su esposa sufre un grave accidente que la deja en coma. Mientras intenta establecer una conexión con sus hijas problemáticas -la precoz Scottie, de 10 años (Amara Miller), y la rebelde Alexandra, de 17 (Shailene Woodley)-, también debe enfrentar la complicada decisión de vender las tierras familiares. Los King, herederos de la realeza hawaiana y de misioneros, poseen en Hawai terrenos vírgenes de inmenso valor.

A. O. Scott The New York Times

Llamar 'perfecta' a 'The Descendants' podría ser una especie de insulto, una traición a su compromiso, a su celebración de la imperfercción humana. Es imposible distinguir sus fallos de sus placeres.

Javier Ocaña Diario El País

Algo tan fresco como trascendente. Como suele ocurrir en Payne, en su puesta en escena se mezcla la naturalidad casi de documental con algunas imágenes impactantes. Su escritura siempre es afilada, tanto por su humor como por su amor.

Sergi Sánchez Diario La Razón

Payne tiene el don de hacer pasar por sencillo lo que es trabajo de genio, y su filme, que encuentra un delicado equilibrio entre lo humillante y lo sentimental, tiene la auténtica textura de un trozo de vida.

Jordi Costa Diario El País

Payne en 'Los Descendientes' demuestra una madurez irrefutable y un dominio excepcional de un tono difícil de lograr, enfrentándose a los desafíos más importantes de su carrera.

Mauricio Reina Diario El Tiempo

No está claro si estamos ante una comedia trágica o una tragedia cómica, pero lo cierto es que esos dos ingredientes se neutralizan y pierden eficacia. Además, la credibilidad del drama se debilita con una musiquita dulzarrona que suena todo el tiempo.

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