Críticas Road House. De profesión: duro (2024)

'Road House' es la opción de streaming ideal para cuando te apetece una película de acción a la vieja usanza.

Es gratificante observar a Liman y Gyllenhaal dando vida a un entretenido 'Road House' que se disfruta en su propia burbuja de cultura pop.

Dirigida con maestría y un guion brillante, esta nueva versión de 'Road House' ofrece una perspectiva maravillosamente fresca sobre el héroe de acción. Es una experiencia realmente placentera.

Un remake que no logra superar la versión original interpretada por Patrick Swayze y se siente más como una mera repetición que como una nueva propuesta cinematográfica.

Gyllenhaal es perfecto para el rol, pero surge la pregunta sobre cómo se mide este remake frente al clásico. 'Road House' debería ser emocionante y, lamentablemente, aquí no logra cumplir con esa expectativa.

Entra en el cuadrilátero y ofrece un combate entretenido. Puede que no sea una película para todos los públicos como la original, pero sin duda dejará algunos moratones divertidos.

Jake Gyllenhaal es el único aspecto destacado de este remake, que carece de la intensidad necesaria.

La película evoca la inconsciente tontería característica de los grandes éxitos de los años 80. Aunque la llave de cristal no se asemeja a Missouri y Gyllenhaal no es un Patrick Swayze, el espectador podrá revivir la nostalgia de una era más simple al disfrutar de este tipo de cintas en la gran pantalla.

Gyllenhaal posee un gran potencial para convertirse en un excelente héroe de acción. Las películas de acción no relacionadas con superhéroes suelen recibir críticas negativas, pero el género requiere nuevas voces, y Gyllenhaal tiene lo necesario para destacar.

Un carismático Jake Gyllenhaal se enfrenta a Conor McGregor y logra elevar la historia con un 'remake' intrigante.

Un reboot que sabe estar más que a la altura de la película original de los 80 y donde Jake Gyllenhaal y Conor McGregor nos deleitan con grandes interpretaciones y unos combates de lo más espectaculares.

A pesar de las diferencias, la película mantiene el espíritu de la original y entretiene al público.