Críticas El reino animal (2023)

La historia fantástica de Thomas Cailley tiende a extenderse más de lo necesario, lo que afecta su ritmo.

Kircher es tan cautivador que logra que el espectador se sumerja emocionalmente en la lucha por la supervivencia de Emile. Surge la inquietud sobre una posible continuación de la historia en el futuro.

A pesar de algunos problemas de ritmo, mezcla ciencia ficción, aventura y drama familiar en una película que gustará al público y que cuenta con grandes interpretaciones.

La película ofrece la posibilidad de explorar un enfoque satírico. Sin embargo, opta por quedarse en el terreno de los clichés, en lugar de aprovechar al máximo su creatividad.

A medida que se aleja de su singularidad endémica, la falta de consistencia de la película se funde en una verdad absoluta que es lo suficientemente hermosa y sincera como para mantener unidas todas sus ideas.

Esta película evoca otras obras del género de criaturas presentadas en la sección Un Certain Regard. 'The Animal Kingdom' se sitúa en el lado más destacado de ese espectro, aunque todavía presenta ciertas inconsistencias.

Es un poco demasiado lenta pero cuenta con grandes efectos visuales y actuaciones sólidas.

Una cautivadora fábula que se desarrolla en escenarios naturales impresionantes, acompañada de efectos especiales que son tan creíbles como poéticos.

Es una película inclasificable, un relato de descubrimiento y aprendizaje que incorpora elementos fantásticos, logrando así destacarse como una obra atípica y diferente a las demás.

El juego que propone Cailley fusiona el drama familiar, la ciencia ficción y un tono fabulesco en una narración que tiene éxito en casi todos sus esfuerzos.

Un thriller fantástico original e inquietante.

Una película de efectos especiales y mutantes que invita a la reflexión. No se trata de la típica cinta esperada, sino de una obra que emplea la ciencia ficción para explorar las complejidades de la experiencia humana.