Críticas La ballena (The Whale) (2022)

Brendan Fraser se merece un Oscar por su actuación. 'The Whale' presenta un ritmo y una estructura que siguen las líneas de un melodrama robusto, aunque predecible.

El veterano actor ofrece una interpretación excepcional en la emotiva narrativa dirigida por Darren Aronofsky.

Brendan Fraser marca su retorno en una obra impresionante que destila compasión. La película de Aronofsky es una muestra de belleza y fuerza inigualables.

El director Darren Aronofsky, junto con su protagonista Brendan Fraser, intenta provocar empatía en el espectador, pero no logra alcanzar su objetivo.

Es angustiosa e incómoda, pero si te preparas para el sufrimiento físico y psicológico de Aronofsky, verás el valiente retrato de Fraser de un hombre con un corazón de leviatán.

Aronofsky puede pensar que ofrece un viaje profundamente catártico, pero lo cierto es que solo añade un vacío sentido de dignidad a la miseria retratada en la película.

Un análisis elocuente y poderoso sobre redención. Brendan Fraser ofrece una interpretación sensacional en la nueva película de Darren Aronofsky.

La actuación de Fraser deja una impresión duradera. Es una de las obras más conmovedoras dirigidas por Darren Aronofsky.

Un filme conmovedor y áspero, que puede resultar incómodo en momentos, pero que culmina en un mensaje profundamente humanista. Aronofsky ha creado una de sus mejores obras gracias a la impresionante actuación de Brendan Fraser.

No hay nada que me irrite excesivamente, aunque tampoco que me apasione. La protagoniza Brendan Fraser. Su cuerpo asusta, pero su rostro y su voz expresan con talento, sensibilidad. Es lo que más me gusta de 'La ballena'.

El único cuestionamiento puede ser hacia su director, Aronofsky, un artista audaz y provocador que ha hallado su inspiración en la figura transformada de Brendan Fraser y su lucha con la autodestrucción.

A pesar de caer en los clichés emotivos de su estructura, 'La ballena' brilla gracias a las actuaciones de su elenco, quienes interpretan personajes que se distancian de la condescendencia habitual.

Fraser aporta a Aronofsky una esencia humana que el director parece carecer. A su vez, Darren ofrece una serie de instantes de auténtica crueldad.

La historia se torna monótona desde un principio, aunque cuenta con giros interesantes en su desarrollo. Sin embargo, el desenlace resulta un tanto incómodo y provoca una sensación de vergüenza.

No está mal, pero tampoco tan bien, y vale la pena discernir y separar, apreciar lo que es gordura y lo que es hinchazón.

'La ballena' presenta un planteamiento claro y un desarrollo interesante, aunque Darren Aronofsky en ciertos momentos sobrecarga la narrativa con melodrama, enfatizando en exceso el sufrimiento de su protagonista.