Críticas El Grinch (2018)

Al igual que la desafortunada versión protagonizada por Carrey en 2000, esta adaptación embellece el cuento original con demasiados colores y se adentra en exceso en la profundidad de sus personajes.

El cuento de Navidad de Dr. Seuss resulta excesivamente simple, lo que lo hace vulnerable a ser arruinado por completo. Sin embargo, su simplicidad también se convierte en un obstáculo para sostener la narrativa a lo largo de toda la duración de un largometraje.

Aunque nada puede sustituir la versión de 1966, este brillante remake ofrece una buena dosis de ingenio y ternura. Garantiza pasar un rato entretenido y emotivo delante de la gran pantalla.

Eres un aburrido, Mr. Grinch. Al menos en esta adaptación del cuento clásico de Dr. Seuss. Tus creadores han convertido el mismísimo concepto de 'villano' en un edulcorado cuenco de cereales.

Es como un regalo de Navidad que no hemos pedido. Otra tonta y frenética película para niños.

Un alegre y sarcástico Benedict Cumberbatch logra capturar la esencia del cuento de Dr. Seuss.

Los colores hipnotizan y las texturas, como el vello facial de los Quién y el pelo del Grinch, sorprenden. Sin embargo, parece que algo se ha perdido en la traducción; una parte del carácter y el toque distintivo de Seuss no se perciben.

El Grinch no es malvado, sino simplemente un incomprendido. Esto no es lo único que la película presenta de manera tediosamente convencional; también se encuentran subtramas insulsas y una desesperación palpable por intentar transmitir un espíritu festivo.

Está pensada para un público netamente infantil, con mucho humor físico más que verbal.

La repetición de la fórmula sin explorar nuevas direcciones o innovaciones resulta poco interesante. El relato clásico, con sus giros y su conclusión didáctica, cumple bien con su propósito para el público al que va dirigido.

Lo más complicado de este relato es encontrar el equilibrio entre la parte cómica, el sarcasmo del protagonista y la ternura que finalmente debe prevalecer. Esta película logra esa hazaña, aunque su victoria se siente más como una acumulación de méritos que como un triunfo contundente.

Cumple para entretener e ilustrar a nuevas generaciones de espectadores sobre la historia de dicho personaje y promover su mensaje de unión y solidaridad. Pero no presenta un conflicto realmente interesante entre los personajes.

Ha llegado 'El Grinch' para robarse la Navidad, pero no la arruina ni se arruina así mismo al menos, la película es bastante simpática y hará las delicias de los niños.

En síntesis, esta nueva "El Grinch" es un excelente entretenimiento para chicos y grandes.

Una cinta cálida, pensada en un público infantil, con una factura técnica impecable.