Críticas Joy Ride (2023)

Es un ejemplo soberbio de lo importante que es la representación en la pantalla y demuestra que las comediantes asiático-americanas pueden ser tan divertidas, vulgares y exitosas como sus contrapartes blancas y masculinas.

A veces, tienes que ser muy inteligente para ser realmente estúpido y 'Joy Ryde' ensarta esa aguja con aplomo.

Una 'buddy movie' hilarante y emotiva, que toca todas las notas correctas. Resalta los conceptos de familia elegida, conexiones maternales y la importancia de hacer lo que te brinda felicidad a través de una diversión intensa y picante.

Risas, buena energía y algunas escenas rocambolescas convierten este análisis sobre las relaciones con familiares lejanos en un divertido viaje de autodescubrimiento.

Revienta tópicos y estereotipos, tiene esencia, un ritmo inteligente, y es fabulosamente alocada y orgullosamente explícita.

El debut de Adele Lim te hará llorar a moco tendido, además de demostrar al público que las mujeres saben cómo irse de fiesta.

Un viaje de chicas por Asia divertidísimo, conmovedor y lleno de energía

Un road trip de chicas refrescante y desenfrenado

Es como una mala resaca de las de 'The Hangover'.

La química del reparto y su impecable sincronización se mantienen firmes.

No funcionaría sin la notable química entre las actrices protagónicas. El trazo grueso es el orgulloso camino que espera a las cuatro chicas, pero la velocidad y la ejecución de los gags y situaciones humorísticas son casi siempre efectivas.

Lo que hace realmente potente a esta comedia es su espíritu políticamente incorrecto y el enorme talento de sus actrices protagonistas, por no hablar de su química.