Críticas Garra (2022)

Una película deportiva por encima de la media, con la capacidad de sorprender y emocionar aún en un género tan saludablemente previsible.

La emoción de una historia de perdedores nunca envejece. Es satisfactorio, como suelen ser las mejores películas deportivas: una intensa narrativa de triunfo y adversidad, narrada de manera inteligente.

A veces, los intentos de hacer un retrato más realista del deporte se ven socavados por giros artificiales destinados a manipular las emociones del público. Sandler hace lo mejor que puede.

Con 'Hustle', Sandler ha encontrado finalmente una película en la que de verdad tiene sentido contratar a Patrick y a O'Neal.

Un auténtico placer para el público.

Reforzado por Sandler y un reparto comprometido, junto con una impresionante dirección de Zagar, 'Hustle' es una gran entrada en el canon del cine deportivo.

La película triunfa gracias a la combinación de encanto desenfadado y un potente juego interior, incluida la autenticidad de las abundantes secuencias de baloncesto.

Tiene mucho de fórmula, pero funciona en casi todos sus aspectos y con el protagonista en uno de sus mejores registros.

Una sencilla, tradicional y relativamente emotiva película deportiva sobre segundas oportunidades.

Una película que no solo sigue la fórmula establecida, sino que la utiliza de manera efectiva y la enriquece, logrando así forjar su propia identidad. Sin ser extraordinaria, es una obra honesta que palpita con sinceridad.

'Garra' es una película que resulta irresistible, en gran medida gracias a Adam Sandler, quien es el auténtico corazón emocional de este drama deportivo.