Críticas Las aventuras del doctor Dolittle (2020)

Una jauría de mediocridad. Un batiburrillo de ideas empalagosas y extravagancias agotadoras.

Una versión poco inspirada y desechable del doctor amigo de los animales. No logra cautivar ni entretener, aunque tampoco es una catástrofe; este es el mayor elogio que puedo ofrecer.

Vuelve, 'Cats': te perdonamos. Ni Iron Man puede salvarla.

En definitiva, 'Dolittle' no sólo es una historia floja y mal contada, también es un desperdicio de talento.

Los padres apreciarán que es lo suficientemente estimulante para que los niños no se aburran, aunque ellos no querrán volver a verla, ya que es desechable.

Apenas presenta elementos atractivos. El elenco no tiene mucho que aportar más allá de cobrar. Si eres seguidor de Downey, es recomendable que la evites.

Por cada interacción interesante que tiene Downey con un animal, hay otra exagerada o un diálogo vergonzosamente cursi.

Un desastre total. Es realmente mala. No llega a ser completamente ofensiva, pero se acerca a lo desagradable.

Ha habido meses de remontaje y ajuste, pero parece que lo hicieron con apio, ya que la función se vuelve más inerte mientras intentan transformarla en una versión de 'Piratas del Caribe' o una atracción similar.

Un relato torpe, sin fluidez ni gracia, con un festival de sobreactuaciones (empezando por el propio Downey Jr.), animales digitalizados que no resultan demasiado simpáticos ni entrañables.

Humor físico, varias escenas de riesgo y algunos diálogos afortunados se cuentan entre las virtudes de una película narrada con corrección clásica.

Esta versión es uno de esos despropósitos memorables con los que Hollywood nos suele sorprender cada tanto, y justamente por sus dimensiones gigantescas la película no es tan desastrosas como se podría suponer.

Reclama su éxito en una constelación de detalles atinados que se rehúsa a ser la sumatoria de sus partes. Sí: entretiene y agrada. Sí: se olvida a la brevedad. La película lo sabe y guiña un ojo.