Críticas Exodus: Dioses y reyes (2014)

Épica impasible. Esta adaptación resulta demasiado solemne, sin mencionar algunas decisiones de casting. A excepción de las ingeniosas plagas de ranas y langostas, incluso los efectos especiales se ven opacados por la impresionante interpretación de Charlton Heston al separar el mar Rojo.

Audaz y sin concesiones, esta película se presenta como una epopeya bíblica que desafía tu fe en el orden de las cosas, más que reafirmarla.

Una obra cinematográficamente irreprochable, en la línea de algunos de sus últimos trabajos, atildados en la forma pero nunca sorprendentes y únicos (...) lo más demoledor en 'Exodus', con diferencia, resulta ser su vertiente política.

Un faraónico 'blockbuster'. Scott logra plasmar en imágenes, que casi siempre son impactantes, la profunda soledad que envuelve a quienes ejercen el poder sobre los demás.

Apabullante. Megaproducción para disfrutar en el cine. Aunque la trama puede no convencerte, las plagas son difíciles de olvidar.

Es impresionante, aunque no deja una huella duradera.

El filme reúne todos los elementos que generan un cine popular, partiendo de su espectacularidad y vistosidad formal.

No estamos ante una versión radical ni extremadamente revisionista; simplemente, se vuelve a narrar la liberación del pueblo judío de la esclavitud en Egipto.

Es un discreto melodrama que luego deviene en imponente épica. En sus propias contradicciones y desniveles están las dos caras, las múltiples facetas de un director como Ridley Scott.

El truco del guión para que el mismo Moisés no pueda negar el milagro que experimenta junto a todo su pueblo merece celebrarse como un raro ejemplo del talento de contar una viejisima historia de un modo novedoso, convincente, y emocionante.