Críticas La Gomera (2019)

Un film repleto de canciones, con un guión y un montaje virtuosos, además de contar con buenas propuestas en su puesta en escena.

La peculiar visión de Porumboiu respecto al género de los atracos tiene un encanto muy especial. Le da un toque muy irónico a una película que sostiene su reparto.

Una película densa pero entretenida. Resulta muy disfrutable, aunque en ocasiones puede parecer demasiado simple y parece estar obsesionada con incorporar elementos característicos de los clásicos del cine negro.

Porumboiu presenta una trama compleja y fascinante que, aunque enrevesada, logra mantener el interés del espectador. Se trata de un entretenimiento elegante y meticulosamente elaborado.

La película introduce un nuevo género: el 'metathriller'. Todo esto se complementa con un sentido del humor sutilmente estrafalario, característico del cine contemporáneo. Presenta una intriga intensa, caótica y brutal.

Me ha aburrido notablemente; tiene vocación de cine negro, y se supone que ocurrirán sucesos emocionantes, pero en realidad hay solo tedio.

Notabilísimo thriller que, a través de la narrativa de Porumboiu, va más allá de ser solo un rompecabezas. Nos invita a aprender un nuevo idioma para comprender su historia, desafiando y deconstruyendo los códigos tradicionales de la narración.

El sustrato articulador, la libertad narrativa, el sentido del humor, los giros constantes y los cambios de registro la convierten en la película más inclasificable de la sección oficial. Es una propuesta muy estimulante.

Juego de atmósferas y de colores, de un trabajo fotográfico impecable y muy diverso, el director vuelve a trabajar de manera excelente con la pérdida y las obsesiones, combinándolas con un enfoque renovado.

Si hay algo que prodiga de inicio a fin 'La Gomera' es placer. Su liviandad indisimulada, una característica poco frecuente en el cine de Corneliu Porumboiu.

Porumboiu maneja el género policial con gran destreza. La película está llena de giros inesperados, un humor peculiar y algunas referencias sutiles, incluyendo un toque que recuerda a la icónica escena de la ducha de "Psicosis", al estilo de Hitchcock.

Porumboiu no se limita a las referencias populares, sino que elabora con firmeza su compleja e inesperada trama. Su enfoque es muy diferente al de la mayoría del nuevo cine rumano y sus fríos retratos sociales; además, demuestra que también es capaz de jugar ingeniosamente con la revisión de géneros.

Más que la historia en sí misma, la película destaca por su propuesta formal, el ingenioso uso de motivos y las inesperadas direcciones de la narración. La cinematografía de Porumboiu es precisa y efectiva.