Críticas Gloria Bell (2018)

La película se beneficia de la detallada y sutil actuación de Julianne Moore. 'Gloria Bell' logra mantener su rumbo sin apenas errores.

Moore está simplemente perfecta. Es una película muy entretenida, decididamente catártica en su presentación de un personaje tridimensional.

Te puede gustar 'Gloria' y seguir pensando que 'Gloria Bell' es una versión admirable que se sostiene por sí sola homenajeando a la original. La actuación de Moore funciona de manera sutil y discreta.

Presenta una universalidad tierna que es absorbente por derecho propio. Es una versión interesante y creativa.

Sebastián Lelio ha conseguido un remake muy satisfactorio de su propia película.

La principal diferencia entre este remake y 'Gloria' (2013) se encuentra en su reparto. No se trata de un melodrama compungido, sino que, a su manera, es vitalista.

La película ajusta adecuadamente lo necesario para mantenerse fiel tanto en espíritu como en la historia a la obra original. Es igual de buena y, al mismo tiempo, diferente.

Se deja ver con fluidez y es una película que funciona. Pero no del mismo modo que funcionó 'Gloria'. Abusa quizás un poco de las elipsis, esos saltos de continuidad de tiempo o de espacio que no hacen perder el hilo de la narración, pero sí la despojan de tiempos muertos y circunstancias anexas.

'Gloria Bell' presenta un enfoque más alegre y contemporáneo en comparación con su versión original, lo que resulta en la pérdida de algunas temáticas significativas.

Es en ella y su encanto en que se ancla el relato, sumando la solidez de nombres de su elenco como John Turturro y Holland Taylor, así como la capacidad de Sebastián Lelio, su director.