Críticas Philomena (2013)

Petulante pero eficaz film de los que agradan al gran público juega astutamente con su material para obtener las risas y la indignación justa, y también las lágrimas.

Una película conmovedora y estimulante.

Es Dench, que muestra cómo la fe y el empeño pueden residir en una misma mujer, la que hace de 'Philomena' una película conmovedora y memorable.

Una obra de incuestionable valor social, 'Philomena' es tanto un cine de denuncia como un cine popular. Es una película que invita a la emoción.

Un decorativo y tradicional elemento de menaje cinematográfico y melodramático que conserva en su interior un fuego de crítica social, tenue, aunque presente.

Bordea peligrosamente la road picture maniquea de los buenos sentimientos contrariados y la posnota roja trituracorazones.

'Philomena' es una curiosa combinación de esos dos extremos, despertando a veces emociones genuinas en el espectador, pero llevándolo también a los terrenos del canal de televisión Hallmark.

Este duelo actoral, manejado por la mano maestra de Stephen Frears, es el principal valor de la película.

Nunca pierde su nobleza, su carga emotiva y al mismo evita tanto la demagogia como la bajada de línea obvia, recargada y discursiva, cuanto tenía todo servido para eso.

Es una tocante comedia dramática basada en un caso real, con gran actuación de Judy Dench, buena mezcla de risa y dolor, y algunos palos a las monjas irlandesas y al gobierno de Reagan.