Críticas Aftersun (2022)

El hecho de que una directora pueda reunir semejante madurez emocional y una gran originalidad narrativa en su primer trabajo, sobre todo desde un punto de vista profundamente personal, resulta sorprendente.

Una luminosa delicia, es un retrato sutil y complejo sobre la paternidad tras el divorcio. La película de Wells se ondula y ofrece destellos como una piscina llena de misterio. Los detalles se acumulan; las imágenes reverberan.

Wells acierta plenamente y logra un gran trabajo; se le considera una de las voces más prometedoras del cine británico en los últimos años.

No es sólo una película honesta sobre cómo recordamos a las personas que hemos perdido, sino que también es un acto de memoria en sí mismo. Wells logra crear una obra que reverbera mucho más allá de sus fotogramas.

'Aftersun' es una experiencia sensorial intensa y, al mismo tiempo, dolorosamente melancólica. Además, se posiciona como uno de los debuts más sobresalientes presentados en el Festival de Cannes en años.

Una de las películas más sublimes del año hasta la fecha

Con su primer largometraje, 'Aftersun', Charlotte Wells ha establecido rápidamente una voz singular llena de delicadeza y una profunda sensibilidad.

Al no ofrecer explicaciones narrativas convencionales, la guionista y directora Wells intensifica la urgencia de la película. Es una obra que evoca la memoria y desprende un poderoso resplandor.

A su manera suave y modesta, 'Aftersun' podría romperte el corazón.

Wells es un gran descubrimiento. Si los defectos de la película reflejan una mirada aún poco madura, 'Aftersoon' marca la llegada de una voz artística que los espectadores seguirán durante mucho tiempo.

Hermosísima, sin duda una de las mejores películas del año. La opacidad que rodea a ese padre cordial y enigmático es lo que dota de significado a todo el filme, convirtiéndolo en un precioso poema.

Un filme cargado de sutileza y madurez sobre las relaciones paternofiliales, el recuerdo, la ausencia, el descubrimiento y el reconocimiento.

No es una película extensa, pero logra disimularlo con su ritmo contemplativo y pausado, al mismo tiempo que presenta una estética ‘bonita’ y casi poética, aunque resulta un tanto insípida.

'Aftersun' es una película tan íntima como universal, capaz de asumir la mirada infantil sin mistificarla, restituyendo su aguda consciencia, su firme percepción.

Es una película emocionante cuyo juego se termina de desplegar hacia el final, cuando los espectadores, como la protagonista, recuerdan lo que han visto durante toda la historia.

Dentro de su embriagadora simpleza, la cual es aún más por lo que sugiere, encuentra la profundidad de los sentimientos y, de paso, se permite hacer un guiño a la nostalgia por aquel mundo análogo que ya se fue.

'Aftersun' examina con ternura la paternidad, sin ocultar los momentos difíciles y naturales de la vida.