Críticas Carol (2015)

Es una obra cremosamente sensual, espléndidamente observada, generosamente detallada y amueblada. Entré en un trance viéndola y aún no he salido del todo de él.

Un hechizo romántico que cala hondo. Una de las mejores películas del año. Blanchett y Mara deberían ser convocadas a los Oscar.

Las excepcionales interpretaciones de Cate Blanchett y Rooney Mara hacen de 'Carol' algo especial, una meticulosa, inteligente y un poco pausada adaptación de Todd Haynes de la novela de Patricia Highsmith.

Una frágil narrativa tan exquisita como el encaje de Chantilly. Haynes ajusta las emociones de la época como los movimientos en una sinfonía.

Al mismo tiempo ardiente y analítica, cerebral y embriagadora, 'Carol' es un estudio de la atracción humana, desde la física y la óptica de Eros (...) una sinfonía de ángulos y miradas, de colores y de sombras.

Con sus espectaculares interpretaciones y un pasado que chisporrotea de vida gracias a su impresionante dirección, 'Carol' crea un memorable romance envuelto para regalo.

Su historia resulta definitivamente demasiado fría y familiar para alcanzar las cumbres melodramáticas de la 'Far from Heaven' de Haynes; no obstante, posee una admirable comprensión de las complejidades del deseo humano.

Si la narrativa de Haynes te deja con la boca abierta, las maravillosas interpretaciones de Cate Blanchett y de Rooney Mara están al mismo nivel. Es una película con tanto estilo como verosimilitud, la crees y la sientes.

'Carol' es estética, pero también ética. Es gran cine. Es amor y pasión. Es Sirk, redivivo y actualizado.

Una obra maestra que cuenta la historia de amor entre Cate Blanchett y Rooney Mara, quienes ofrecen interpretaciones sublimes. Fue recibida con ovaciones en Cannes 2015, dejando a este cronista con lágrimas en los ojos.

'Carol' ya pertenece a esa familia de películas pequeñas absolutamente épicas.­ Obra maestra sobre el enamoramiento. Verlo en pantalla es casi tan bonito como vivirlo.

Haynes construye un film exquisito desde la narración, desde el trabajo interpretativo y, sobre todo, desde lo visual.

La particular sensibilidad del director de 'Lejos del paraíso' hacia el melodrama alcanza su cumbre con esta extraordinaria adaptación de una de las primeras novelas de Patricia Highsmith.

Historia de amor que se sabe difícil, pero no imposible. Que se sabe, y con orgullo, esplendorosa, certeramente cinematográfica.

La trama recurre a clichés lamentables, algo decepcionante para un cineasta de la talla de Haynes. Además, este director maneja a Blanchett con excesiva cautela, lo que resulta en una interpretación que se siente distante.

'Carol' nos brinda la oportunidad de experimentar la admiración y la inmensa felicidad de conectarnos con nuestros héroes. Haynes desarrolla de forma compleja la vivencia de Therese, ya que él refleja su esencia.

Película de gestos y sutilezas, donde se adivina una pasión a punto del grado de ebullición, pero donde jamás la histeria, (...) La cinta tiene su ritmo y Todd Haynes, un verdadero autor, la maneja con respeto, dejando que hable sola.

La búsqueda de una receta y su repetición es lo que caracteriza al cine industrial de Hollywood. En ocasiones esta fórmula funciona, pero otros resultados son menos satisfactorios. 'Carol' no es un desastre, pero sí representa un caso de desarrollo frustrado y esplendor marchito.

Lo mejor de Carol son sus primeros 45 minutos, donde el director Todd Haynes aborda con sutileza y sin clisés la irrefrenable atracción que se da entre las protagonistas.

Empieza bien el año fílmico con esta buena realización, ambientación de época, trabajo de cámara, puesta en escena y actuación, gran actuación. Un todo fílmico que se hace imprescindible de ver y disfrutar.

Elegancia es una palabra que describe perfectamente cada toma de esta hermosa historia de amor, que es capaz de narrar la ingenuidad del comienzo, el deseo desaforado y la angustia de la distancia, con la misma eficacia emotiva.

Haynes se muestra como un cineasta menos recargado y más austero. 'Carol' aborda una faceta poco explorada del cine estadounidense, donde figuras como James Gray, P. T. Anderson, Tarantino y Todd Haynes contribuyen a su confirmación.

Parece desprender una elegancia artificial envuelta en una espléndida reconstrucción de época. Sin embargo, el filme se centra casi exclusivamente en las actuaciones de Blanchett y Mara, que se convierten en el único imán capaz de mantener la atención del público.

Todo se abisma en la solución fácil. El verdadero tema se diluye en el mero sobreactuado. Aún así, una película más fallida que mala.

Haynes logra que la emoción, la tristeza y la melancolía se apoderen del espectador y no lo suelten por mucho, mucho tiempo.

Rooney Mara y Cate Blanchett se destacan de manera impresionante en "Carol", una adaptación exquisita de una novela de Patricia Highsmith que se vive con una tensión palpable.