Críticas West Side Story (2021)

Una nueva adaptación que te dejará sin aliento. Entrego mi corazón a este conmovedor cuento de hadas de amor maldito en América.

El primer musical de Spielberg se presenta como una obra definitiva, comparable a su adaptación cinematográfica anterior y rinde un merecido homenaje al talento de Stephen Sondheim.

Nadie necesita un remake de 'West Side Story'. Pero ¿y qué tal un renacimiento? Un cuento de hadas moderno, un trabajo de solemne belleza situado en una época y en una Nueva York que ya no existen.

Apenas hay una escena que no sea bella o donde el ritmo decaiga. Emotiva y desgarradora, es una adaptación fiel a sus orígenes, pero siempre viva y moderna.

Las nuevas voces que participan son verdaderos genios, incluidos Spielberg, el guionista Tony Kushner, el director de fotografía Janusz Kaminski, el coreógrafo Justin Peck y su asombroso reparto.

Obra complementaria que parece conversar con el original de Wise y Robbins. Uno de los trabajos de Hollywood más visualmente deslumbrantes en la memoria reciente.

Con estupendas actuaciones de Rachel Zegler y Ariana DeBose, la versión de Spielberg se mantiene fiel a la original, pero resulta más auténtica, dinámica y cuidadosa.

Una mezcla explosiva de arte musical de la vieja escuela y sensibilidades modernas: es una de las mejores películas del año y una de las mejores películas de la carrera del aclamado director.

Cuando ofrece su mejor versión, le da a todo una sensación de urgencia que refuerza lo embriagador que es todo lo que estás viendo.

Spielberg es lo suficientemente inteligente para reconocer que la original fue algo único. Ha logrado crear su propio milagro.

¿Su romance? El más tierno. ¿Sus bailes? Los más enérgicos y desesperados. ¿Y sus canciones? Como si 'Maria' o 'Tonight' necesitasen otra razón para quedarse en tu cabeza, son más pegadizas que nunca.

Un torbellino de energía eufórica. Esta 'West Side Story', sin embargo, brilla más cuando se adentra y se asienta en el estudio de los personajes.

Una 'West Side Story' magníficamente fiel. Una nueva adaptación espléndida y dinámicamente orquestada del musical atemporal, en la que Steven Spielberg por fin da rienda suelta al niño de teatro que lleva dentro.

Cuando el propio suelo que pisamos se vuelve incierto, la necesidad de pasión se hace aún más evidente, y la fidelidad de Spielberg a ese sentimiento y a sus propias decisiones sostiene la vitalidad de esta apuesta.

Spielberg ofrece un derroche de entusiasmo y una producción excepcional. Ha intentado construir un gran espectáculo con la intención de revivir las salas de cine. Desearía que realmente funcionara, aunque tengo serias dudas al respecto.

Spielberg consigue lo que parecía imposible: con una hábil ironía a los escépticos, su adaptación se siente justificada. Más clásico que el original de 1961, Spielberg rinde homenaje al mito.

Una extraordinaria adaptación que revitaliza un clásico sin alterarlo en exceso, logrando que lo experimentemos como si fuera la primera vez.

El disfrute ha sido innegable. Spielberg logra añadir su toque mágico a un clásico que parece intocable y difícil de mejorar, demostrando su maestría como director.

La maestría de Steven Spielberg se ratifica en esta versión de 'Amor sin barreras' (West Side Story), que supera a la original y demuestra que la genialidad del realizador está a la altura de los más grandes maestros.

La dirección es increíble, no por buena, sino por cautelosa. Spielberg evita meter la pata siendo políticamente correcto. Claro, su reciclado parece buen montaje. Pero carece de inspiración.

Spielberg es de los pocos cineastas que mezclan tecnología con alma. En esta ocasión, nos entrega una obra que se le nota formativa de su primera juventud.

Un clásico del cine es recreado de una manera impresionante, gracias a un estupendo director, a un prestigioso guionista, a un grupo de talentosos actores y a una fotografía y dirección de arte que dejarán al espectador conmovido y sin aliento.